La tarima principal fue colocada en la Av. Ayacucho cruce con Bolívar (Muy cerca del comando del partido político Primero Justicia) en sentido Oeste-Este. En la primera hora de convocatoria se llenaron al menos 4 cuadras (Pichincha, Carabobo, Libertad y Sánchez Carrero) totalmente abarrotadas de gente (en ambos sentidos de la Bolívar) gritando consignas llenas de esperanza, al voltear atrás te dabas cuenta que las personas seguían llegando, no hubo otra opción más que caminar hacia atrás para poder respirar producto del conglomerado y el calor infinito de esa tarde. El pueblo fue puntual al llamado y de modo natural comienza “El Maracayazo”, de norte a sur y de este a oeste se movilizaron a esta concentración jóvenes, adultos mayores, niñas, niños y adolescentes para presenciar en carne propia la venida de “El Flaco”.
Se movieron a pie, y en particulares en su gran mayoría, sin embargo de las zonas cercanas como Cagua, Turmero y La Victoria, San Mateo, etc. Salieron al menos 3 buses por locación, lo que hace un total de 12 a 20 autobuses para ser parte de la historia de la ciudad. Los estacionamientos de las zonas aledañas a la Av Bolivar y centros comerciales como el Galeria Plaza y La Hormiga estaban literalmente “a reventar” de vehículos particulares, las avenidas transversales completamente llenas por la convocatoria, sigue llegando la gente, esto es indetenible, es el espíritu de un pueblo que en definitiva se volcó a las calles para escribir una importante página en la historia contemporánea de la ciudad. Banderas de todos los colores ondeaban, la expectativa era protagonista con el pasar de los minutos, generando en la mente la pregunta ¿Y ahora qué viene?
Había que caminar un poco más atrás porque el oxígeno empezaba a faltar, “amuñuñados” unos con otros, esta gente tiene la fiel convicción de aguantar lo que sea con tal de ver a Henrique Capriles Radonski de cerca, sin embargo llegó el momento en que no se podía caminar hacia ninguna dirección, lo que indicaba claramente un llenazo total. Las fotos a lo alto de los edificios cercanos serían el único cuantificador y la única posibilidad de saber la magnitud de esta concentración, se corría la voz entre los asistentes “la concentración llegó un poco más allá de la catedral” (recalcando el lleno en ambos sentidos). Se pudo conocer que en el recinto católico ya se encontraba “El Flaco” quién venía llegando de San Felipe estado Yaracuy, sólo él, Dios y las paredes de la catedral saben las oraciones que ahí probablemente haya hecho por su condición de creyente.
5:30pm y comenzó a sonar continuamente la canción insignia de la campaña “Henrique con H de Hay, Capriles con C de Camino…” y junto con la música venía una ola gigantesca, de atrás hacia adelante, un grito al unísono de las más de 100.000 personas que asistieron “Se ve, se siente, Capriles Presidente…” Mientras que “Algo bueno está pasando…” sonaba, las banderas ondeaban sin parar lo que era excelente porque generaban brisa y esto permitía respirar con mayor facilidad. “Cada vez son miles y miles…” Si, estaba convencido que eran al menos 100mil personas en toda la Bolívar y sus respectivas transversales estaban abarrotadas. “Está aclarando la mañana en Venezuela…” creo que esa tarde definitivamente tenía aspecto de mañana.
Las personas cada vez más atentas y expectantes, todos alrededor decían “Ahí viene el hombre…” frase muy bien empleada y que jamás olvidaré. En efecto ahí venía Henrique, viendo a los ojos a sus seguidores, repartiendo sonrisas y muchas gorras tricolor; gorra que se había convertido en un símbolo para los seguidores de este candidato, posterior a un rechazo emitido por el CNE en donde se prohíbe el uso de símbolos patrios durante la campaña. Cada vez se encontraba más cerca, pero no fue tan sencillo el transitar del Flaco por la cantidad de personas que ahí estaban. Aires de esperanza florecían en cada uno de sus seguidores; y dicen que la esperanza es lo último que se pierde. Estuve a unos 3 metros cerca de él en el instante en que pasa entre la cuadra de la libertad y pichincha, cuando finalmente logró pasar, logré verlo a los ojos y sentir una energía increíble, fueron 2 segundos eternos, como en cámara lenta.
Los abrazos entre los asistentes eran extraordinarios, eran similares a los que solemos dar en la entrada de año nuevo acompañado de ojos empañados por lágrimas, lágrimas de alegría, felicidad y buena energía. Ese hombre tiene todas las características de ser un presidente. Para mayor sorpresa, la información más inmediata, posterior al discurso del flaco fue la concentración de un grupo de personas en la parte de atrás de la tarima principal, pues estos aparentemente esperaban la llegada de Capriles por esa zona. Tres cuadras y media en ambos sentidos… Si, como leyeron, tres cuadras y media en ambos sentidos, por la parte trasera de la tarima principal, lo que hace un total enorme de 12 cuadras y media (sin sumar la cantidad de personas apostadas en las transversales que estaban en su mayoría repletas) lo que me hace pensar que el Maracayazo fue todo un éxito.
Por otra parte, el pasado Sábado 29 de Septiembre, se da un movimiento social titulado "El respaldazo" y se corre el gran rumor de la venida del Comandante Hugo Chávez a Maracay y se observa al actual gobernador Rafael Isea en distintos medios regionales haciendo invitación formal a cada uno de sus simpatizantes para ofrecer apoyo al mismo y de este modo hacer una concentración multitudinaria, desde las doce del mediodía en adelante. Lo que sucedió ese día, desde el punto de vista técnico, fue un montaje de al menos 7 tarimas o “estaciones”; en ellas, se presentaron diferentes artistas que simpatizan enormemente con el proceso revolucionario y varios líderes de la región haciendo mitings políticos en cada una de ellas y finalmente una tarima principal donde ocurrió exactamente lo mismo al mando del Gobernador del Estado.
A esta actividad no asistí y sería irresponsable de mi parte emitir juicios de valor por lo sucedido el sábado. Sin embargo, hay que hacer énfasis en algo notorio y es que en la ciudad hubo un enorme desfile de autobuses provenientes en su mayoría de zonas cercanas como Mariara, Turmero, Cagua, Villa de Cura y San Juan de los Morros. La sorpresa de la jornada fue la ausencia del alto mandatario; es decir, el comandante/presidente no llegó y aparentemente jamás se habría ofrecido tal cosa. Con mucha inquietud se quedaron muchos de los seguidores de Hugo Rafael, puesto que cada uno de los ahí asistentes había ido con la firme intención de ver al comandante en jefe. No obstante, esa misma tarde se hace saber la noticia que el candidato-presidente vendría a Maracay el miércoles 3 de Octubre a hacer el cierre de campaña en la ciudad.
Ahora bien, noten con mucha atención el énfasis hecho hace un par de párrafos en la palabra “estaciones” y sólo así entenderán que muy probablemente lo del sábado pudo ser una práctica o simulacro de lo que se haría el miércoles, ciertamente estoy especulando en este momento, sin embargo me atrevo a decir que no es mera casualidad que haya sucedido lo mismo en el resto de lo que a continuación intento narrar. El tiempo fue implacable como siempre suele ser y finalmente llegó el 3 de Octubre, se cerraba la campaña oficialista en la Maracay “Roja rojita” aquella que se alzó militar y cívicamente el 4 de Febrero de 1992 bajo el mando de un hombre nacido en Sabaneta de Barinas de apellido Chávez y que con su “Por Ahora” le cambiaría el modo de ver y pensar al país entero, producto del desgaste político del gobierno de la 4ta República.
Les recuerdo que hacían sólo 7 días de aquél inolvidable “Maracayazo”, en lo que a mi modo de ver las cosas, fue una primera demostración de fuerza en la convocatoria cortesía de los simpatizantes de Capriles. Sería todo un reto para el oficialismo superar lo sucedido hace una semana atrás. Por lo que, definitivamente esta concentración se tornaba interesante, incluso con morbo; para poder palpar en carne propia lo que sucedería en la tarde de ese miércoles 03 de Octubre del año en curso. La hora de convocatoria para los asistentes fue desde las 12:00 del medio día hasta las 5:30pm aproximadamente. La ubicación de la tarima principal estaría ubicada en la Av Bolivar cruce con Av Junín, muy cerca del registro principal del estado Aragua, en sentido Este-Oeste, para así contrastar con la movilización de hace 7 días o porque sencillamente era una ubicación estratégica para el traslado rápido y efectivo del candidato de gobierno a la tarima principal.
Vestido con la camisa de La Vinotinto y con un profundo sentir crítico, hago un 1er recorrido a las 2:10pm incorporándome por la Av Mariño (donde encontramos una 1era estación o tarima pequeña) y una pantalla para poder presenciar la transmisión del discurso del comandante. Hacían vida en el lugar un conglomerado de aproximadamente 300 a 400 personas en ambos sentidos quienes disfrutaban la presentación en vivo de una agrupación local. Posteriormente sucede una especie de boulevard entre la Mariño y López Aveledo, donde muchos comerciantes informales ofrecían artículos alusivos a Hugo Rafael y un grupo no menos importante de simpatizantes hacían presencia, sin embargo estaban muy dispersos entre una cuadra y otra.
Este transcurrir sucedió de la misma manera y con las mismas características entre la segunda, tercera, cuarta y quinta estación o tarima respectivamente, antes de llegar a la tarima grande donde se escuchaba claramente los jingles y canciones de la eterna campaña del presidente… “Adelante Comandante” de SkaP, acompañados de otras camionetas con sonidos poderosos y de ellas salía la voz del presidente diciendo en un tono agresivo “LOS QUE QUIERAN PATRIA, VENGAN CONMIGO…” la euforia se desataba y el discurso de los asistentes solía referirse con bastante frecuencia al “Paquetazo Neoliberal” del “Majunche/JalaBola” de CAPriles (CAP: Siglas empleadas para referirse al ex presidente Carlos Andrés Pérez). “Palo por ese culo, y palo…”, por supuesto, también sonaba la plena de Hany Kauam “Vive tu vida y venceremos, Chávez corazón del pueblo” acompañado de la consigna popular “son 10, son 10 millones son 10”.
Ciertamente, para ser las 2:30 pm ya habían bastante seguidores, y en efecto, a esa hora ya no se podía seguir avanzando hacia las cercanías de la tarima a partir de la Av sucre, sólo 2 cuadras me separaban para poder llegar a ese sitio, por lo que, la mejor opción fue tomar la transversal (Sucre) y bordear por la Miranda (que estuvo concurrida, sin embargo el transito permanecía en el área con normalidad) para de este modo acercarme lo más que pudiera al objetivo, es decir, a la tarima principal. Lo que me fue imposible, porque el acceso por la Av. Junín estaba totalmente cerrado por una pared de metal de al menos 4 metros de altura y custodiada fuertemente por efectivos militares y así mi plan principal había sido frustrado, pero no me rendiría tan fácilmente…
Lo interesante y que más llama la atención, comienza y ocurre, cuando en esta primera caminata que hago por la Bolivar desde la av. Mariño hasta la Sucre y luego por la av. Miranda hacia la Plaza Bolívar, fue observar una cantidad importantísima de autobuses totalmente identificados con afiches y rayados con Griffin con consignas alusivas el proceso, algunos de esos buses de uso oficial, otros provenientes de zonas aledañas a la ciudad y así otra vez, como en el sábado anterior, cobró protagonismo el enorme estacionamiento en los alrededores de la plaza bolívar y la antigua gobernación. Seguía la “multitud” llegando y concentrándose para escuchar el discurso del máximo líder de la revolución en Venezuela y con él transcurría el tiempo, ya estaba en la parte de atrás de la tarima, que por cierto, estaba cerrado el acceso a ella por la calle Brion, en la esquina del Banco del Tesoro y Hospital Civil. Sería prácticamente imposible para algunos seguidores del proceso ver a Chávez desde la parte posterior de la tarima porque una nueva pared metálica de 4 metros de altura y de color negro había sido levantada y junto a ella un grupo de efectivos militares preparados para cualquier eventualidad; probablemente como medida de seguridad…
Se hacía necesario descansar e hidratarse y así lo hice en uno de los banquitos de la Plaza, donde se suele disfrutar un ambiente fresco y agradable, producto de la enorme vegetación que esta posee. Ahí estaba como siempre la imponente estatua de nuestro libertador Simón Bolivar montado en su caballo, siendo rebelde, eterno líder de Venezuela y América Latina. Poco más de 1 hora y 20 minutos transcurrió para que el candidato presidente llegara, y de este modo ofreciera una pequeña entrevista a varios medios de comunicación, clara señal de que en pocos minutos empezaría a dirigirse a todos los asistentes, lo que me activó y me hace intentar estar cerca para cuantificar la cantidad de personas y contrastar con el “Maracayazo”.
Tendría que bordear nuevamente por la Miranda que tenía bastantes personas caminando en sentido contrario a la tarima, estos no representaban un impedimento en el tránsito; y así poder observar con detalle todo lo que ocurría. Los ánimos de la gente al escuchar la voz del máximo líder se hacían bastante agresivos, de gestos obscenos, palabras soeces y se daba en la gente una especie de hipnosis colectiva, que lejos de desbordar buena energía tornaban el ambiente gris y pesado. El acceso hacia la bolívar se hizo imposible por la Junín por la pared metálica de 4 metros y por la Sucre por la cantidad de personas, así que esta vez tendría que intentar llegar por la 5 de Julio, que también fue imposible, bordeo nuevamente por la Miranda y esta vez ingresaría por la López Aveledo, que no estaba tan difícil para incorporarme así a la Bolívar. 3 cuadras y media totalmente explotadas en ambos sentidos.
A partir de ahí hasta la Av. Mariño, se repite el boulevard y en este recorrido habían 2 grupos de tambores tocando al mismo tiempo, lo que dificultaba enormemente poder prestarle atención al discurso del Líder Revolucionario, quién anunciaba para ese momento “querer abrazarnos a todos”. Al llegar a esta estación, el comandante hacía una invitación a la tarima a una pequeña niña proveniente del barrio Los Cocos (zona afectada por la situación del lago los tacariguas, ubicada al sur de la ciudad) para contar por qué estaba ahí, sin embargo la algarabía no permitió escuchar el mensaje con claridad. Pero claramente en lectura de labios de la niña esta dijo “Yo te quiero decir algo, nosotros no tenemos casa”. En esta avenida, propiamente dicho había un conglomerado no mayor a las 600 personas incluidas las muchas motos manejadas por personas con un aspecto poco confiable. ¡Esa cuadra estuvo llena!
Curiosamente, vuelve la tónica de “boulevard” a hacer presencia en las subsiguientes avenidas, con “estaciones” o tarimas pequeñas estratégicamente colocadas, pantallas y sonidos. Los grupos no mayores a las 150 personas en cada punto. La tónica, definitivamente era repetida y redundante en la medida que caminaba un poco más allá, codeándome con la gente en las Av Soublette, Boulevard Pérez Almarza, Vargas, Sánchez Carrero, Libertad y Carabobo respectivamente donde era el punto final de la concentración o pequeñas concentraciones a lo largo de la avenida. Finalmente accedo al centro comercial Galería Plaza, hasta la planta alta, con la firme intención de corroborar lo antes visto y tomar unas cuantas fotografías que me permitieran de alguna manera mostrar con suficientes argumentos lo que desde mi óptica fue un vil y descarado engaño para el presidente de la república y un intento infructuoso de hacer ver una Av. Bolívar totalmente llena e intentar mantener el mito de una Maracay “Roja, rojita”.
Muchas preguntas surgieron en mi mente a partir de este 2do recorrido, el cual me tomó un aproximado de 30 minutos hacer, de punta a punta y por el medio de la calle, desde adentro de los que simpatizan con el comandante. Esta concentración dejó muchas aristas y en lo que a mí concierne, la concentración y cierre de campaña de Hugo Rafael Chávez Frías, a quién hoy califico como “el saliente”, no fue exitosa; y eso se evidenció en el rostro de cada uno de los asistentes, a quienes se le veía claramente la frustración dibujada con falsa alegría pues esta era su última oportunidad para medir fuerzas en la ciudad jardín de Venezuela, en donde a la postre
no hubo quórum.
PD: El Maracayazo, fue sin duda alguna una de las movilizaciones más importantes que haya sucedido en la historia contemporánea de la ciudad desde 1998, cuando en algún momento, el hoy presidente saliente, ofreciera un lleno con características similares.
